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Libro: ANTIFRÁGIL

ANTIFRÁGIL

Las cosas que se benefician del desorden

Nassim Nicholas Taleb

La antifraghilidad es más que resistencia o robustez, pues no se trata solo de aguantar sino también de mejorar. Es fundamental tener presente que si la antifragilidad es una propiedad de todos los sistemas naturales que han sobrevivido, privar a estos sistemas de volatilidad, aleatoriedad y estresores (cualquier estímulo, condición o situación que genera estrés en una persona) los perjudicará. Del mismo modo que pasarse un mes en la cama provoca atrofia muscular, los sistemas complejos se debilitan y hasta mueren si se ven privados de estresores.

Transigir es consentir. George Santayana: “Un hombre es moralmente libre si… juzga al mundo y juzga a los demás con una sinceridad a ultranza”. Y eso no solo es una meta: es una obligación.

Libro I. Introducción a lo antifrágil

La hormesis, una palabra creada por los farmacólogos, se refiere al hecho de que una dosis pequeña de una sustancia perjudicial puede ser beneficiosa para el organismo y actuar como una medicina.

El mitridatismo es la resistencia a un veneno adquirida mediante la autoadministración progresiva y gradual de dosis no letales.

El mismo mecanismo de sobrecompensación hace que nos concentremos mejor en la presencia de un mínimo de ruido de fondo, como si el hecho de contrarrestarlo nos ayudara a concentrar el foco central.

Séneca escribió: “El castigo repetido sofoca el odio de unos cuantos pero aviva el de todos… igual que de los árboles, una vez podados, brotan incontables ramas”. Las revoluciones se alimentan de la represión: brotan más y más cabezas cuando literalmente se cortan las de algunos manifestantes.

Un regla heurística que podemos enunciar es : para calcular la calidad de una investigación, tomemos el calibre del mayor detractor o el del menor detractor al que el autor responda públicamente: el que sea más pequeño.

No deja de ser desconcertante  que las personas que más nos han beneficiado no sean las que han intentado ayudarnos, sino los que han intentado perjudicarnos en vano.

Los intelectuales tienden a centrarse más en las respuestas negativas del azar (fragilidad) que en las positivas (antifragilidad).

L ausencia del estrés puede causar envejecimiento y que privar de estresares a sistemas antifrágiles ávidos de ellos da lugar una gran fragilidad que extrapolaremos a los sistemas políticos en el libro II.

A veces vemos a personas que han sobrevivido a pruebas muy duras y, puesto que la población superviviente es más robusta que la original, suponemos que esas pruebas han resultado positivas para ellas. Es evidente que la población superviviente es más fuerte que la inicial, pero no sucede lo mismo con los individuos, porque los más débiles han perecido. Alguien ha pagado muy caro la mejora del sistema.

MI sueño -la solución- es que celebremos cada año un Día del Emprendedor con el siguiente mensaje: La mayoría de vosotros fracasaréis, seréis poco respetados, os empobreceréis, pero os agradecemos los riesgos que habéis corrido y los sacrificios que habéis hecho por el crecimiento económico del planeta y por librar a los demás de la pobreza. Os debemos nuestra antifragilidad. Y el país lo agradece.

Libro II. La modernidad y la negación de la antifragilidad

Una de las leyes de la vida es que no hay estabilidad sin volatilidad.

Dos elementos fundamentales de la modernidad son el intervencionismo ingenuo y los costes asociados a arreglar cosas que deberíamos dejar en paz.

Se llama iatrogenia, literalmente significa causado por el sanador, al hecho de que un tratamiento provoque más perjuicios que beneficios.

Los conductores necesitan la tensión y los estresares que nacen de la sensación de peligro y aguzan su atención y su control del riesgo: un buen ejemplo es que mueren menos peatones cruzando la calzada por donde no deben que usando los pasos de cebra.

La procrastinación es una defensa natural consistente en dejar que las cosas sigan su curso y ejerzan su antifragilidad.

“Lo único que quiero es vivir en un mundo donde las previsiones no me perjudiquen. Y ese mundo tiene un atributo especial: robustez”. La idea de la Tríada nació allí y entonces en respuesta a esa frustración : fragilidad – robustez – antifragilidad para sustituir los métodos preeictivos.

Libro III. Una visión no predictiva del mundo

La fragilidad implica tener más que perder que ganar, lo que equivale a más aspectos negativos que positivos, lo que equivale a una asimetría (desfavorable) y la antifragilidad implica tener más que ganar que perder, lo que equivales a más aspectos positivos que negativos, lo que equivale a una asimetría (favorable).

Si algo es frágil, la amenaza de que se rompa implica que todo lo que hagamos para mejorarlo o hacerlo diferente será inútil si antes no reducimos el riesgo de rotura. Como escribió Publio Sirio, no se puede hacer nada – o prácticamente nada- con prisa y seguridad a la vez.

Proverbio yiddish: “Prepárate para lo peor porque lo mejor se encarga de sí mismo”.

Una estrategia de haltera es una estrategia dual que se basa en una combinación de dos extremos ( uno seguro y el otro especulativo), que se considera más robusta que una estrategia unimodal; suele constituir una condición necesaria de la antifragilidad. Un ejemplo sería un escritor que se procura otro medio para ganarse la vida y se libera así de las presiones del mercado durante el tiempo libre que dedica a escribir.

Del mismo modo que el estoicismo es la domesticación – que no eliminación – de las emociones, la haltera es una domesticación – que no eliminación – de la incertidumbre.

Libro IV. Opcionalidad, tecnología e inteligencia de la antifragilidad

La antifragilidad implica tener más que ganar que perder, equivale a una asimetría favorable, lo que equivale a que le gusta la volatilidad.. Si salimos más beneficiados cuando tenemos razón de lo que nos perjudica fallar, a la larga nos beneficiaremos de la volatilidad y a la inversa.

Las opciones sean de la clase que sean (la opcionalidad) son vectores de la antifragilidad si nos permiten ganar más de lo que podemos perder.

Opción = asimetría + racionalidad. El componente de la racionalidad consiste en conservar lo bueno, deshacerse de lo malo y saber retener las ganancias.

Hoy por hoy, nadie se atreve a señalar lo evidente: que el crecimiento en la sociedad no puede surgir de elevar la media a la manera asiática, sino de aumentar el número de personas en las colas, ese número pequeño, muy pequeño, de personas que se arriesgan y que está lo bastante locas para tener ideas propias, las personas dotadas de esa cualidad tan rara llamada imaginación y de la cualidad aún más rara llamada coraje, y que hacen que ocurran cosas.

Enseñar a las aves cómo deben volar consiste en invertir la flecha de circulación del conocimiento, haciendo creer que va del mundo académico (práctica o educación) a la riqueza.

No estoy diciendo que la educación sea inútil para el individuo: le otorga unos credenciales muy útiles para su carrera, pero este efecto se diluye en el nivel del país. La educación estabiliza las rentas de una familia entre una generación y la siguiente. Un comerciante gana dinero, luego sus hijos van a la Sorbona y se convierten en magistrados o médicos. La familia conserva. La riqueza porque los títulos académicos permiten que sus miembros se mantengan en la clase media mucho tiempo después de que la riqueza original se haya agotado: ¿Educación da riqueza y crecimiento económico o bien Riqueza y crecimiento económico dan educación?

Estamos muy seguros que los romanos construyeron los acueductos sin matemáticas. Creo que de lo contrario ya no estarían en pie porque una consecuencia manifiesta de la matemática es que la gente optimiza demasiado y reduce gastos originando fragilidad. Basta con ver que lo nuevo es cada vez menos duradero que lo antiguo.

Si queremos entender los insulsos que son los argumentos modernistas actuales, consideremos la diferencia entre los leones que viven en libertad y los que viven en cautividad. Los leones de los zoos viven más, técnicamente son más ricos y tienen más seguridad de un trabajo garantizado de por vida, si son esos los criterios por los que nos queremos guiar… Sñeneca expresó este problema: “No estudiamos para la vida sino para el aula”.

Libro V. Lo no lineal y lo no lineal (sic)

Lo convexo (complexidad positiva, cara alegre)  es antigrágil y lo cóncavo (convexidad negativa, cara triste)) es frágil. Un suceso afecta en mayor grado (positivo) cuanto mayor es la exposición, las ganancias serán muy altas (convexo) o bien las pérdidas (cóncavo).

La globalización ha tenido el efecto de crear contagios a escala planetaria, como si el mundo se hubiera convertido en un recinto gigantesco de salidas muy estrechas y la gente corriera hacia ellas con unos daños cada vez mayores. Sin duda, podemos atribuir el efecto fragilizador de la globalización contemporánea a la complejidad y al hecho de que la conectividad y los contagios culturales hacen que los cambios de las variables económicas sean mucho más graves: el clásico cambio a Extremistán (territorio en el que resulta concebible que el total se vea afectado por el impacto de una sola observación) . Pero existe otro efecto, la riqueza. Riqueza significa más y a causa de la escalada no lineal, más es diferente. Tendemos a cometer más errores graves simplemente por ser más ricos.

Efecto de la no linealidad donde la media carece de importancia. Es evidente que los cambios de temperatura serán más perjudiciales cuanto más se desvíen de los 22º ( una abuela viven durante dos horas a una temperatura media de 22º, pero que pasa si vive una hora a 0 grados y otra a 40º). La noción de media carece de importancia cuando uno es frágil a la variaciones.

Si tenemos asimetrías favorables o una convexidad positiva, a la larga saldremos razonablemente bien parados y superaremos la media en presencia de incertidumbre. Cuanto mayor sea la incertidumbre, más importante es el papel de la opcionalidad y mejor nos irán las cosas. Esta propiedad es fundamental para la vida.

Libro VI. Vía negativa

En general, podemos decir que el fallo (y la refutación) son más informativos que el éxito y la confirmación, y que por eso digo que el conocimiento negativo es sencillamente más robusto.

Steve Jobs: “La gente cree que centrarse en algo implica decir que sí a aquello en lo que te enfocas. Pero eso no es ni mucho memos lo que quiere decir. Significa, más bien, rechazar el centenar de otras buenas ideas que hay por ahí. Uno tiene que escoger con cuidado. Lo cierto es que me siento tan orgullosos de las cosas que no hemos hecho como de las que sí. Innovación es decir que no a mil cosas”.

Pruebas del experimento menos es más. En su libro El gorila invisible, Christopher Chabris y Daniel Simons nos muestran que a los espectadores de un vídeo de un partido de baloncesto pueden pasarles completamente inadvertido un gorila que cruce epor el centro de la cancha si en ese momento andan distraídos con otros detalles que se les ha pedido que se fijen y que absorben su atención como, por ejemplo, contar la cantidad de pases entre los jugadores.

La asimetría fundamental es que lo antifrágil sale beneficiado de la volatilidad y el desorden; lo frágil sale perjudicado. A estos efectos, decir tiempo es lo mismo que decir desorden.

Ovidio: el tiempo todo lo devora; Elsa triolet: el tiempo abrasa pero no deja cenizas; poema francés: el tiempo lo borra todo, incluso los malos recuerdos.

Neomanía: mal del amor a lo moderno por su modernidad misma.

Para lo perecedero, cada día adicional de vida se traduce en una esperanza de vida adicional más corta. Para lo imperecedero, cada día adicional puede suponer una esperanza de vida más larga.

El primer principio de la iatrogenia es el siguiente: no necesitamos prueba de una daño para afirmar que un fármaco o un procedimiento antinatural por vía positiva es peligroso. El segunda principio de la iatrogenia es que esta es no lineal ( no deberíamos asumir riesgos con personas que están prácticamente sanas; pero sí deberíamos asumir más con quienes consideremos que corren peligro).

Libro VII. La ética de la fragilidad y la antifragilidad

¿Por qué no nos repelen las empresas que van enunciando por ahí lo geniales que son? Digamos que estas compañías pueden incurrir en tres niveles de infracción:

  • Nivel de infracción leve: empresas descaradamente autopromocionales, solo se dañan a sí mismas con ello
  • Nivel de infracción crítico: las compañías tratan de representarse a sí mismas desde la óptica más favorable posible, al tiempo que nos ocultan los defectos de sus productos
  • Nivel de infracción grave: empresas que intentan facilitarnos una representación engañosa de sus productos jugando con nuestros sesgos cognitivos.

Anexos:

  1. Glosario
  2. Gráficos
  3. Aspectos muy técnicos
  4. Notas, ideas y lecturas adicionales

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